Los organizadores miraban al
cielo, mientras las nubes transitaban el firmamento, si bien estaba reservado un
salón cubierto por si llovía, la plaza, la iglesia de fondo y la acústica sin
rebotes de paredes eran el escenario ideal. Finalmente el clima dijo sí y las
bandas sonaron más fuertes que nunca.
La espontaneidad de los niños,
que en la previa entremezclan afinación de instrumentos, con corridas y juegos,
las bastoneras que antes de iniciar el show posan sus bastones en el suelo para
descansar, el público colmó la plaza, muchos cabrerenses viajaron los pocos
kilómetros que nos separan de Deheza y se deleitaron.
En este año el espectáculo
fue montado sobre una calle pública, para que todas las bandas armaran sus
estructuras al mismo tiempo y no se hicieran claros entre una actuación y otra,
decisión acertada para el público que desde el primer acorde disfrutó un
espectáculo sin interrupciones.
Cada banda fue mostrando un
par de temas de su repertorio y se iban rotando hasta completar el show, y
cuando la medianoche cerraba la jornada el momento más espectacular, solamente
superado por lo que era la superbanda del bicentenario que pasó por la misma
plaza en 2010, los doscientos músicos tocando marchas tradicionales todos
juntos, los acordes llenaban la plaza y provocaron el deleite de hasta los más
reacios.
General Cabrera estuvo
representada en el evento por la clarinetista Estefanía Bessone, que forma parte
de la Banda de General Deheza, organizadora del evento del que formaron parte
cinco bandas infanto juveniles de música, además de la anfitriona estuvieron presentes músicos de Santa Eufemia, La
Carlota, Ordoñez y Ballesteros haciendo de la edición 2012 de este festival la
más importante de los últimos años.
Comentarios
Publicar un comentario